viernes, 23 de abril de 2010
Un poema de José Hierro (1922-2002)
Destino Alegre
De "Tierra sin nosotros" (1947)
Nos han abandonado en medio del camino.
Entre la luz íbamos ciegos.
Somos aves de paso, nubes altas de estío,
vagabundos eternos.
Mala gente que pasa cantando por los campos.
Aunque el camino es áspero y son duros los tiempos,
cantamos con el alma. Y no hay un hombre solo
que comprenda la viva razón del canto nuestro.
Vivimos y morimos muertes y vidas de otros.
Sobre nuestras espaldas pesan mucho los muertos.
Su hondo grito nos pide que muramos un poco,
como murieron todos ellos,
que vivamos deprisa, quemando locamente
la vida que ellos no vivieron.
Ríos furiosos, ríos turbios, ríos veloces.
(Pero nadie nos mide lo hondo, sino lo estrecho.)
Mordemos las orillas, derribamos los puentes.
Dicen que vamos ciegos.
Pero vivimos. Llevan nuestras aguas la esencia
de las muertes y vidas de vivos y de muertos.
Ya veis si es bien alegre saber a ciencia cierta
que hemos nacido para esto.
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8 comentarios:
¡Qué buen poema! Gracias por traerlo al frente.
Saludos
Lindo poemita, Flaco. Me gustó mucho. Este verso "Vivimos y morimos muertes y vidas de otros" me recordó a jorge riechmann.
A propósito de hierro, ahí mentado.
No sé si usted quiere ver en mi blog una polémica entre Asterión y Luissiana Naranjo sobre... poesía.
"Teatro, idioma, actores y personajes en C.R."
http://lahuelladelojo.blogspot.com/
Asterión: faltaba más.
Jenaro: no sé quien es ese george, pero ya ya lo "gugleo".
William: Sí, vi la discusión. Como suele pasar en estas cosas, los dos llevan razón y los dos se equivocan. En el fondo están de acuerdo.
Debo decir, en todo caso, que José Hierro sí que tiene hermosísimos sonetos.
Me gustó mucho flaco! Matizado y sustancioso.
Eso rombito, que bueno verle por acá!
A mi también me gustó la frase que dice el Jenaro, pero a mi me recordó a la familia Pola.
Fallas. Extendete hermano porque quedé viendo pola ventana al ciprés!
A mí me gusta mucho esto:
Ríos furiosos, ríos turbios, ríos veloces.
(Pero nadie nos mide lo hondo, sino lo estrecho.)
Mordemos las orillas, derribamos los puentes.
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