miércoles, 14 de julio de 2010

Ofelia distraída

El niño con caballo Picasso

sin embargo fue ella
con un pecho de dos lunas saludables y saladas
Violetera           con pecho de animala rugidora
levantando el polvo tras los trenes
que se achican en la memoria
para inventar distancias y canciones de viajeros
Violetera me fundó ciudades
en las cavernas del músculo arenoso
y en cada una puso un viejo criador de perros
que lamen sus ruinas monumentales
y olisquean sus ancestros imaginarios

Ofelia o Violetera o
muchacha de tetas como grutas de confianza
donde imaginar el fuego y tallarlo con palabras
me fundó ciudades y les acercó el viento
con un gesto del vestido
ciudades donde había solo ecos en reposo
y les puso parques que hospedan la niebla itinerante
para que los niños asesinos duerman y sueñen
sus venganzas amorosas
les acercó el viento Violetera
con un tañer de falda lleno de ánimos de pájaro
o de todo lo que vuela

Ofelia o Violetera o
como se llaman las mujeres
porque es buena
se distrajo
para entrarme en sus espasmos
y fundarme ciudades
en la máquina que pulsa
en el músculo arenoso
en la arena del molusco
se distrajo Violofelia.

3 comentarios:

Gustavo Solórzano-Alfaro dijo...

¡Qué buen poema! Algunas imáganes qu eme gustan mucho, con un ritmo excelente:

"Violetera me fundó ciudades
en las cavernas del músculo arenoso"

"Ofelia o Violetera o
muchacha de tetas como grutas de confianza
donde imaginar el fuego y tallarlo con palabras
me fundó ciudades y les acercó el viento
con un gesto del vestido"

En fin, me gusta el ritmo, el estilo...

Saludos

Pelele dijo...

Asterión: gracias por el comentario y por pasar a leer.

Saludos

Jenaro dijo...

Este es el tipo de textos que mejor te sale. Muy bien.