miércoles, 1 de septiembre de 2010

Another day / Caballo de Cartón




Every day she takes a morning bath she wets her hair,
Wraps a towel around her
As she's heading for the bedroom chair,
It's just another day.
Slipping into stockings,
Stepping into shoes,
Dipping in the pocket of her raincoat.
Ah, it's just another day.

At the office where the papers grow she takes a break,
Drinks another coffee
And she finds it hard to stay awake,
It's just another day. Du du du du du

Ay
So sad, so sad,
Sometimes she feels so sad.
Alone in her apartment she'd dwell,
Till the man of her dreams comes to break the spell.
Ah, stay, don't stand around
And he comes and he stays
But he leaves the next day,
So sad.
Sometimes she feels so sad.

As she posts another letter to the sound of five,
People gather 'round her
And she finds it hard to stay alive,
It's just another day. Du du du du du 

Ay
So sad, so sad,
Sometimes she feels so sad.
Alone in her apartment she'd dwell,
Till the man of her dreams comes to break the spell.

Ah, stay, don't stand around
And he comes and he stays
But he leaves the next day,
So sad.
Sometimes she feels so sad.

Every day she takes a morning bath she wets her hair,
Wraps a towel around her
As she's heading for the bedroom chair,
It's just another day.

Slipping into stockings,
Stepping into shoes,
Dipping in the pockets of her raincoat.

Ah, it's just another day. Du du du du du

Paul MacCartney



Cada mañana bostezas, amenazas al despertador
y te levantas gruñendo cuando todavía duerme el sol,
mínima tregua en el bar, café con dos de azúcar y croissant,
el metro huele a podrido, carne de cañón y soledad.

Tirso de Molina, Sol, Gran Vía, Tribunal,
¿Dónde queda tu oficina para irte a buscar?
Cuando la ciudad pinte sus labios de neón
subirás en mi caballo de cartón.
Me podrán robar tus días… tus noches no.

Que buena estás corazón, cuando pasas grita el albañil
el obseso del vagón se toca mientras piensa en tí,
la voz de tu jefe brama “estas no son horas de llegar”
mientras tus manos archivan tu mente empieza a navegar.

Tirso de Molina, Sol, Gran Vía, Tribunal,
¿Dónde queda tu oficina para irte a buscar?
Cuando la ciudad pinte sus labios de neón
subirás en mi caballo de cartón.
Me podrán robar tus días… tus noches no.

Ambiguas horas que mezclan al borracho y al madrugador,
danza de trajes sin cuerpo al obsceno ritmo del vagón,
hace siglos que pensaron: “las cosas mañana irán mejor”
es pronto para el deseo y muy tarde para el amor.

Tirso de Molina, Sol, Gran Vía, Tribunal,
¿Dónde queda tu oficina para irte a buscar?
Cuando la ciudad pinte sus labios de neón
subirás en mi caballo de cartón.
Me podrán robar tus días… tus noches no.

Joaquín Sabina

4 comentarios:

C.A. Fallas dijo...

Buena pieza, buenas piezas. Las cosas de la voda no?

C.A. Fallas dijo...

Las cosas de la vida //sorry, es el pulso.

Pelele dijo...

Sí, las cosas de la viuda...voda...vida

Gustavo Solórzano-Alfaro dijo...

McCartney solo no me enloquece, pero esta sí es de mis preferidas. Y bueno, ni modo, Sabina casi nunca me enloquece.

Saludos