Los
recuerdo frágiles
dos
astillas
dos
cuerpos apenas.
Los
recuerdo de reojo
apenas
dos cuerpos
con
la cabeza desenvainada
y
un miedo o una furia en el pecho
el
uno triturando la herencia sentimental
de
una familia crecida al borde de las aceras
la
una componiendo adivinanzas para la muerte.
Nadie
sabe por dónde empiezan o por dónde acaban los sueños
ni
por qué los amigos esconden melcochas y navajas
en
todas las casas que abandonan
ellos
eran apenas dos cuerpos
sobre
los que nadie pudo escribir
moneda
o corazón o huella
sin
creer por un momento
que
le sepultaban la mano en un campo extenso y fértil
por
el que pasan sin esmero las estaciones.
Antes
de perderse en la Soledad Grande
los
vi por última vez
separados
para siempre
dolidos
para siempre de mundo y de lo otro.
De Junkyard Orchestra