domingo, 20 de julio de 2008

Versos


Permanezco casi siempre ausente,
me diluvio asiduo por las calles,

para no anclarme en los detalles
beso en el olvido de la gente.

Me pongo un abrigo por soledades
y juego a dos manos cada turno,

alimento, vanidad de vanidades,
un soliloquio ambiguo y nocturno.

Acecho la lencería del desvelo
soñando ecos en los callejones,

crezco el desdén en tres cubos de hielo
y el amor en la mudez de los pezones.

Me hago grande con el sol a medio día
y niño roto con la luna en los botones.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Que bueno lalito, me llego, me llego...

Pelele dijo...

Gracias compay